Con lágrimas en los ojos, tengo que deciros que si me jodéis, os voy a matar a todos

“Cuando te cargas a alguien por primera vez no se trata de un hecho insignificante. Dicho esto, hay algunos capullos en el mundo a quienes hay que disparar. Hay cazadores y hay víctimas. Y en función de tu disciplina, tú decides si eres cazador o si eres víctima”.

La frase podría estar sacada del sargento de artillería Hartmann en Full Metal Jacket. Pero no. La frase no es de un personaje de ficción sino del próximo secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis. El general retirado del cuerpo de Marines hace 4 años ha sido nombrado por Donald Trump como el máximo responsable militar de EEUU en su Gobierno.

 

 

En el transcurso del primer mítin de Trump después de la victoria, en Cincinnati (Ohio), el presidente electo confirmó las informaciones de CNN y The Washigton Post que situaban a Mattis al frente del Pentágono. Trump se reunió con Mattis previamente el pasado 20 de noviembre, en el marco de la ronda de contactos que mantuvo en su club de golf de Nueva Jersey con los futuros miembros de su gabinete. Después de esa reunión, Trump quedó impresionado por la figura del militar, a quien describió como “un general de generales”.

 

Perro loco, Monje de la guerra y Caos

Mattis ingresó en el cuerpo de Marines en 1969. Desde entonces ha participado en numerosas misiones de combate. Su carácter en el campo de batalla le ha valido el apodo de “Perro Loco”. En los círculos militares también se le conoce por los sobrenombres de “Monje de la guerra” y “Caos”.

Según la CNNsu apodo más conocido se lo ganó en 2004, en el transcurso de la batalla de Fallujah en Irak, donde lideró la ofensiva de los marines junto a las tropas británicas contra la insurgencia. Fallujah fue una de las batallas más duras de la guerra, en la que cientos de marines perdieron la vida al encontrarse cercados en una ratonera de los muyahidines.

Dentro de los Marines, entre 2010 y 2013, dirigió el Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM), desde donde coordinó las operaciones militares de EEUU en Oriente Medio, el Norte de África y Asia Central.

 

A Mattis los describen como alguien que en la misma conversación puede hablar de Sun Tzu, de Ulysses S. Grant, de George Patton, de Shakespeare y hasta de la Biblia, para luego esculpir frases como “hay que ser educado y profesional, pero siempre con un plan para matar a cualquier persona que conozcas”.

 

Fuentes militares cercanas al personaje citadas por varios medios le describen como un hombre entregado a la causa de la guerra. Mattis no tiene hijos, no ve la televisión y dedica sus horas libres a leer tratados de estrategia y memorias de generales como Napoleón. Durante sus campañas militares era habitual encontrar en su mesa de noche biografías como la del emperador Romano Marco Aurelio.

Según The Telegraphes un hombre que en la misma conversación puede hablar de Sun Tzu, de Ulysses S. Grant, de George Patton, de Shakespeare y hasta de la Biblia, para luego esculpir frases como “hay que ser educado y profesional, pero siempre con un plan para matar a cualquier persona que conozcas”.

 

 

Otras frases como “Siempre voy en son de paz. No he traído a la artillería. Pero con lágrimas en los ojos, tengo que deciros que si me jodéis, os voy a matar a todos”, o “Nunca pierdo el sueño por la noche por el miedo a fracasar, porque no se pronunciar esa palabra”, han elevado al personaje a la categoría de mito dentro de los Marines.

Una fuente militar citada por Heavy, lo define como “el guerrero más respetado de nuestros días entre los que han luchado en una guerra”.

 

Crítico con Obama y problemas con Theranos

Mattis ha sido muy crítico con la política militar de Obama, en particular con el tratado nuclear cerrado el año pasado con Irán. El nuevo hombre fuerte de Trump ha definido esa estrategia como una “amenaza para la región”.

Otro punto relevante en la carrera de Mattis es una información publicada por el Washington Post que vincula al general con un intento de colaboración militar con la controvertida startup Theranos. El periódico ha tenido acceso a unos emails que prueban el interés de Mattis en la tecnología de análisis de sangre de la empresa. Su objetivo era implantar esta tecnología en un laboratorio de campaña en Afganistán.

 

Entre los soldados estadounidenses con experiencia en combate, a Mattis se le considera "el guerrero más respetado"

 

Theranos se erigió como un referente que llamó a revolucionar los análisis de sangre a través de tests inmediatos con volúmenes de sangre pequeños. Sin embargo, más tarde se confirmó la falta de eficacia de esta tecnología. Mattis estableció contacto con la compañía en el año 2012, antes de que estallara la polémica en la empresa californiana.

La ley estadounidense establece que un secretario de Defensa con carrera militar debe haber estado retirado, como mínimo, siete años, una condición que Mattis incumple (se retiró en 2013). Para que se haga efectivo el nombramiento, es necesaria la aprobación del Senado y que el Congreso acuerde una excepción a este requisito.

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