La fiscalía federal de Alemania ha detenido a un hombre de 28 años, sospechoso de haber sido el autor del atentado que sufrió el autobús del Borussia Dortmund hace diez días.

El acusado, de origen ruso-alemán, se habría hospedado en el mismo hotel del equipo amarillo, en una planta superior. Desde allí mismo fue desde donde Sergei W. compró 15.000 derechos de venta de acciones del Dortmund, desembolso para el que previamente habría adquirido un crédito.

Con fecha máxima de 17 de junio, el sospechoso planeaba vender como derivados financieros, a un precio prefijado y más alto que el real, las acciones dramáticamente devaluadas del equipo tras haber sufrido "un ataque terrorista".

En total, la policía calcula que Sergei W. habría ganado 3,9 millones de euros con su operación especuladora. También asegura que el sospechoso habría intentado culpar al yihadismo de los ataques dejando cartas falsas en el lugar de los hechos.

Los investigadores confirmaron la inocencia del primer detenido, un iraquí de 26 años del que se habló de "simpatías yihadistas". Los artefactos que hicieron explosión fueron tres, colocados al paso del autobús del Dortmund. La metralla de uno de ellos provocó que el defensa catalán Marc Bartra tuviera que ser operado por una fractura del radio y que el partido se pospusiese al día siguiente.