El sacerdote y director de mi escuela me violaba

El sacerdote y director de mi escuela me violaba”, se destapa un caso más de los Legionarios de Cristo. Tras la revelación del informe en diciembre pasado, se revelaron 175 casos de abuso sexual infantil perpetrados por dicha congregación.

En diciembre se reveló un informe en el que se constataron los abusos sexuales en contra de 175 niños por parte de miembros de los Legionarios de Cristo. Al menos 60 de ellos fueron víctimas de su fundador: Marcial Maciel.

Desde ese momento las denuncias y los testimonios de violencia sexual ocurridos en la congregación religiosa no han parado. Una mujer identificada como Biani López Antúnez reveló que fue víctima de abuso sexual por parte del sacerdote y director de la institución educativa a la que asistía desde los ocho hasta los 10 años.

La ahora museógrafa de 37 años escribió una carta dirigida a su maestra en la que afirmaba que el sacerdote y director de la escuela la besaba cerca de la boca y la cargaba entre sus piernas, asimismo, asegura que hacía lo mismo con sus compañeras.

“En ese entonces López Antúnez escribió una carta en la que le contaba a su maestra que el sacerdote y director de la escuela les daba a ella y sus compañeras 2 besos cada vez más cerca de la boca” y “las cargaba entre las piernas“. (Vía: BBCNEWS)

 

López Antúnez fue alumna del Instituto Cumbres en Cancún en 1991, tenía ocho años, por lo que, se encontraba en tercero de primaria. El director en ese entonces era el sacerdote Fernando Martínez, quien según Antúnez fue puesto en ese cargo a pesar de haber sido acusado de abuso sexual.

“Él mismo había reconocido una acusación del 91 e incluso pidió no ser trasladado a Cancún porque no se sentía “firme” para aceptar esa responsabilidad tras las acusaciones”. (Vía: BBCNEWS)

La museógrafa explicó que el abuso fue gradual desde tocamientos hasta violaciones , incluso aseguró que estaba coludido con una de las maestras que sacaba a las niñas de las clases y  las llevaba a las capillas donde sucedían las agresiones sexuales.

Según el testimonio de López hacía que las niñas vieran las agresiones que eran cometidas a las demás. Asimismo, contó que una de las maestras la descubrió junto a un grupo de niñas llorando, les pidió una explicación y ella sólo pudo escribir una carta. Según su testimonio, la maestra también era cómplice del sacerdote.

“En nuestra mente infantil era difícil discernir que la maestra Aurora era su cómplice y que ella nos llevaba con él a sabiendas de lo que nos estaba haciendo”. (El Universal)

 

 

 

 

 

La entonces menor de edad contó sobre los abusos a su madre, quien habló con las madres de otras niñas abusadas. Las madres hablaron con Eloy Bedia Diez, quien fungía como director territorial de los Legionarios en junio de 1993, pero no se hizo nada al respecto. 

Con información de: BBCNEWS

 

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