En octubre de este año, Facebook introdujo “Marketplace”, una nueva función de la red social que permite subir clasificados a la plataforma.

Un lugar para comprar y vender bicicletas, peluches, cafeteras, sillones. La forma en la que la compañía de Mark Zuckerberg compite contra Craigslist, eBay o Segundamano.

Hace unas semanas, esta función estuvo disponible para teléfonos móviles en México:

Le picas al iconito de la tiendita, y verás ofertas disponibles en tu zona. También puedes subir cosas que ya no necesites y ponerte de acuerdo con los interesados en comprártelas.

Suena bien, ¿no?

Al poco tiempo, la gente ya abarrotó el Marketplace con utilísimos artículos… como esta máscara para ponerte tonto.

O este adminículo…

Por eso no podemos tener cosas bonitas.

¿Alguien quiere un vochito sin motor? Lléveselo por solo cinco mil varitos.

O de plano, si quieren ser cínicos…

Para enmendar tus errores.

¡¡¡Esta reliquia vale mucho más de lo que cuesta!!!

¿KHÉ?

¡TOMEN TODO MI DINERO!

Si te sobran $518 millones de pesos… vas.

Hasta aquí se metió, WUUUU.

Qué cansador…

A este chico le dio flojera ir a regresar esta camisa al Pull & Bear. Dice que sólo tiene una puesta:

Esta promoción cuesta 50 pesos y es la ganga de tu vida. Toma todo lo que quieras sin ir al baño… WAT?

¿A alguien le interesa comprar una escuela?

¿Qué clase de anuncio es este?

Algún chistosito decidió vender a sus amigos.

A Firulais no le gusta esto.

Esta iniciativa vecinal. WTF.

Sí. Es gratis. ¿Pero cómo se vende?

Hasta nunca. Bye.