Las futbolistas de la selección argentina están en huelga hasta nuevo aviso. Hartas de la precariedad con la que se enfrentan día a día en el deporte que practican, han dicho basta a través de una carta dirigida al presidente de la Comisión de Fútbol Femenino de la Asociación del Fútbol Argentino -AFA-, Ricardo Pinela.

No es el único que debe quedarse con la copla, ya que a las jugadoras argentinas les faltan muchos recursos básicos para competir. Básicamente, piden tres cosas: el pago de las dietas, un campo de césped natural y dormir en un hotel cuando viajan.

"Nuestra disciplina arrastra problemas estructurales de larga data: no se puede practicar un deporte cuando no se cuenta con recursos básicos", aseguran en un comunicado difundido a través de las redes sociales.

"En primer lugar destacamos que el viático -las dietas y dinero que se le da a una persona, para realizar un viaje- correspondiente a las jugadoras que integran a lista presentada por el señor Carlos Borrello para conformar la preselección en vistas de la Copa América no ha sido entregado", continua el texto.

Además, destacan que al tratarse de un "deporte amateur", el viático es la única contribución que reciben para representar a Argentina y que, en muchos casos, deben faltar al trabajo o a las clases para asistir a los entrenamientos.

También solicitan que se aumente el dichoso viático, que actualmente es de 150 pesos diarios -unos 8,5 dólares- algo que no cubre ni por asomo el coste de los viajes.

"Ninguna epopeya deportiva puede llevarse a cabo cuando quienes le prestan el cuerpo deben viajar el mismo día de la competencia entre las 4 y las 9 de la mañana y dormir en un microbús hasta la hora del encuentro, tal como sucedió el 30 de agosto en ocasión del partido amistoso jugado en la ciudad de Montevideo", explican.

"Exigimos que se adecúe el uso de las instalaciones para estar a la altura que el entrenamiento de una selección mayor requiere: necesitamos vestuarios acordes a la cantidad de jugadoras que formamos el plantel, así como una cancha de césped natural para el desarrollo de las prácticas".

Por último, han dejado claro que están abiertas al diálogo para "llevar el fútbol femenino al nivel que se merece", pero está claro que si no se mejoran las condiciones veremos cuántas argentinas van a querer seguir jugando con su selección.