1. Llevas chupe a todo tipo de reuniones.

A to-do tipo. Que se trate de un baby shower no te impide llegar con una botella… o varias.

2. Llamas a tus amigas para invitarlas a una fiesta… a las 3 AM y entre semana.

Obviamente, te cuelgan al primer segundo, o ya se la saben tan bien que ni te contestan.

3. En todas las fotos que se toman, eres la que sale peor.

Porque, básicamente, ya traes tus alcoholes encima. A ellas les vale, las suben y te etiquetan porque se ven bien.

4. Siempre te reclaman porque creen que te importa más el alcohol que su amistad.

Totalmente falso.

5. Te pusieron un apodo para homenajear tu gusto por el alcohol.

El mío, por ejemplo, pues es ese. :(

6. Es muy fácil saber qué regalarte de cumple.

Awwwww, me muero de ternura.

7. Tienes el superpoder de convertir cualquier plan “tranqui” en borrachera.

Netflix & Ron.

8. Tus amigas han perdido la esperanza de encontrar algo de comer en tu refri.

¿Qué querían? ¿Frutas, verduras y comida de verdad?

9. Te buscan específicamente a ti siempre que quieren reventar.

Jamás les fallarías en esta encomienda.

10. Saben perfecto a los cuántos tragos deben quitarte el celular.

Antes de que cometas una babosada de categoría mundial… como escribirle a tu ex.

11. “Ir por un café” siempre significa otra cosa para ti.

Terminas neteando… a medio día en un Starbucks.

12. Siempre sales con alcohol en las fotos que te toman.

Para recordar esos preciosos momentos.

13. Todo el tiempo te etiquetan en estos memes.

Que ni dan risa, la neta.

14. Convencerte de ir a un plan es muy fácil.

La trampa está puesta y no dudas en caer en ella.

15. Cada fin mandas mensajes a su grupo de WhatsApp confesándoles tu amor.

Qué oso.

16. Pero aunque te bullean todo el tiempo, igual te adoran y les importas.