Pakistán ha llegado al último escalafón en una ofensiva contra la disidencia religiosa en las redes sociales. El tribunal anti-terrorista del país ha condenado a un hombre a muerte por blasfemar contra Mahoma en Facebook.

El Tribunal de la ciudad de Bahawalpur, en la provincia de Punjab, ha acusado a Taimoor Raza, de 30 años y perteneciente a la minoría chií, de publicar comentarios despectivos contra Mahoma y contra sus mujeres.

Se acusa al juzgado de publicar "mensajes de odio" con su teléfono mientras estaba esperando en la parada del autobús, donde le arrestaron y le confiscaron el móvil, según recoge Associated Press. El contenido, que supuestamente eran comentarios despectivos contra la mayoría suní del país, fue lo que determinó su acusación.

El año pasado, Raza, fue detenido por tener una discusión sobre el Islam en Facebook con un agente anti-terrorista. Otras 15 personas fueron detenidas, según la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, por delitos similares. 

El veredicto se ha emitido en un momento en el que cualquier insulto al Islam se convierte en un tema muy sensible en el país. Las autoridades pakistaníes han lanzando una dura campaña contra la blasfemia y han pedido ayuda a Facebook y Twitter para identificar a todos aquellos que insulten al profeta Mahoma, e incluso han amenazado con bloquear las páginas que no cumplan el veto.

La de Raza es la primera condena a muerte que se hace por publicar comentarios en Internet, pero ya se han emitido otras por discusiones sobre el Islam alejadas de las redes sociales. En 2010, la cristiana Asia Bibi fue condenada a pena capital por insultar al profeta, aunque todavía está en prisión a la espera de que el Tribunal Supremo estudie a fondo su caso.

Según un informe de Amnistía Internacional, la dura ley anti-blasfemia ha sido utilizada principalmente contra las minorías religiosas del país, y ha servido para hacer falsas acusaciones y dejar en manos de los ciudadanos la aplicación de la ley.