Policías del Estado de México detuvieron el día jueves 13 de febrero en la carretera Texcoco-Lechería a un hombre que intentaba cruzar la carretera exponiendo así su vida. Se trataba de Abraham Raymundo, de 24 años, quien días atrás había asesinado a Brenda Josselin, una joven de 22 años.

Abraham Raymundo les relató que había asesinado a la joven con una pesa de hacer ejercicio y cuando se enteró de que los familiares de la víctima ya la estaban buscando, incluso ya habían establecido una ficha de localización, fue que llevó el cuerpo de la joven a la azotea de su casa con la intención de incinerarla para deshacerse del cuerpo.

Por supuesto, este feminicidio y los que han surgido en los últimos días, por ejemplo el de Íngrid Escamilla, entierran cualquier intención por eliminar el feminicidio de los códigos penales. Al parecer la intención de Gertz Manero era evitar que este tipo de actos criminales en contra de las mujeres deje de ser visible, para que los ciudadanos no se dieran cuenta de que el Estado no está haciendo nada para evitar las agresiones y asesinatos en contra de las mujeres.